Confianza y Abundancia

L

a confianza puede sentirse de tres maneras fundamentales comunes y que todas conocemos en nuestro día a día.

1. La confianza en una misma/o
2. La confianza en los demás
3. La confianza en la vida

El orden de cada una viene a ser, por lo general, en este , según la evolución biológica del ser humano, como de su nivel de consciencia.

Dicho esto, te invito a hacer una reflexión sobre como es posible que un recién nacido tenga más integrada la primera confianza que las demás, y poco a poco, va adquiriendo la segunda, según sus primeras relaciones con su madre o cuidadora, con su padre, con el resto de la familia, y así posteriormente va incorporando más personas a su entorno relacional, conforme su sistema neurológico va madurando y su medio ambiente le va abriendo a la estimulación externa que recibe.

La confianza en la vida, es otra adquisición que toma otro sentido y significado en el ser humano, y que va variando según la etapa en la que nos encontremos, así como las experiencias que hemos vivido. Esta confianza se una y suma a la primera.

Es aquí en donde radica el concepto de Abundancia que hoy me gustaría transmitir y poner énfasis a cualquier otro término, que nos ayude a sentir y conocer la abundancia en nuestra vida.

Las palabras se hacen cortas para dar el verdadero sentido a la importancia de la confianza en la vida, para poder atraer hacia ti todo aquello que vibre en la misma energía que tu, es decir, en confianza con la vida, empezando por personas con unas situaciones o circunstancias, como los recursos externos que necesitas para desarrollarte como persona de manera digna y armónica, sin tener que pasar por situaciones difíciles para aprender a superarlas con la total confianza en ti, en los demás y en la vida misma.

Cuando los tres tipos de confianza se unen en uno, es entonces cuando empiezas a percibir y sentir el verdadero significado de la abundancia en ti, pues entiendes y comprendes que no hay tal separación entre lo que tu eres, los demás y la vida misma.

Te empiezas a identificar con todo lo que es vida, y eso no quiere decir que no seas muerte también, pero esta la percibes desde otra consciencia más elevada, y por tanto, como parte integrante de la vida, que no puede ser separada una de la otra, para tu propia evolución de ser humano, y de alma aprendiendo en el planeta tierra.

El sentido de la verdadera espiritualidad, parte integrante de lo que somos, además de un cuerpo físico, emocional y mental, empieza a colaborar en todo lo que hacemos con y en nuestra vida, sintiéndonos conectadas con una inteligencia superior que está en todas las cosas, sin tiempo y espacio determinado, y que también no está separada de lo que somos en nuestro interior, el cuerpo de luz.

SI confiamos en esta inteligencia incorporada en nosotros como vida que somos, entonces no queda más otra que, confiar en ti y en todo lo que te rodea, pero de una manera distinta a como tu creías que lo hacías antes.

Eres parte co-creativa con todo y todos, parte activa y responsable de todos tus deseos e inspiraciones, en perfecto autocuidado de tu cuerpo físico, emocional y mental, para permitir que todo llegue y se desarrolle en y a través de ti.

Y aquí ocurren los milagros de la confianza en la vida, y por tanto en todo lo que ocurre en ella en infinita abundancia.

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Francis GE